Me aburro

JBG escribió: El problema es que tras una comida en La Troya, difícilmente puede hacerse nada más en todo el día salvo digerir la barbaridad de comida que ponen sobre la mesa...

No "pierdas el foco" de ese libro de anécdotas, por favor.

Yo no voy a La Troya desde hace muchos años, cuando estaba viva la propietaria original y cobraba a ojo, según te veía mas o menos comilón. Un día le hice un favor y ya no había forma de pagar. Dejé de ir porque me daba apuro y, como soy poco comedor, me echaba unas broncas tremendas (¡Aquí se viene a comer, si no come no vuelva a venir!)

Murió hace unos años. Ya no veía casi aunque se empeñaba en seguir gobernando el restaurante. Tuvo la desgracia de que su único hijo murió en accidente de coche viviendo ella todavía. Actualmente es la nieta la que lleva el negocio.

Pero no hay que preocuparse porque hay sitios más adecuados para gente con un estómago normal o tan pequeño como el mío.

Francisco, no sabía que eras extremeño, sólamente estuve en tu comunidad de paso hacia Portugal un par de veces, a ver si podemos ir a verte pronto!

y las tortas del casarrr aarrgggg mmmmm m.... y er jamonsitoo. ..m m mm

Juan Blas escribió: Leer a Brandt,siempre ha sido un placer por el conocimiento que desprende cada una de sus opiniones,conocerlo aumenta considerablemente ese placer.Pancho no es la persona que pasa desapercibida después de cuatro horas de charla, no guarda nada para él, esto es al menos mi sensación posterior al master class que desinteresadamente me ofreció en Trujillo,sin lugar a dudas mereció y mucho la parada en mi vuelta a Madrid.Sabe transmitir aquello que le apasiona y entra directamente sin ningún tipo de obstáculo en aquel que desea ser receptor de su mensaje.Gracias Pancho por tu interés en demostrarme muchas cosas de las que estaba totalmente equivocado y que seguía sin rechistar a lo comercialmente conocido.Para conocernos en la plaza me comentó "llevo una Leica" si señor,no podía ser de otra forma,nuevamente gracias,Trujillo siempre será una parada obligatoria y para aquellos que decidáis conocer a Pancho no olvidéis una libreta y un boli,yo tuve que hacerlo en una servilleta de papel ¡¡¡¡hay que tomar apuntes!!!.
Saludos.

Muchas gracias, Juan. El placer fue mío. Poder charlar de fotografía y de la vida con dos personas tan encantadoras como tu esposa y tú, es impagable. Como somos de pareja edad aunque yo te saco unos pocos años estarás de acuerdo conmigo en que la vida te enseña que las casualidades no existen. Por eso creo en los flechazos a primera vista y no es posible sentirse más a gusto de lo que yo lo estuve charlando con vosotros.

Nunca me he guardado nada. Es una actitud de responsabilidad hacia los demás, de transmisión de conocimientos, seguramente adquirida de mis maestros y de los años en que fui docente. Uno de esos maestros me dijo, cuando era yo un chaval: "El que se guarda lo que sabe es porque sólo tiene eso". Y así lo creo. Pobre del que tiene que ocultar para sí las cuatro cosillas de un oficio que es sota, caballo y rey. Cuando he estado cerca de los grandes he visto que eran personas generosas con sus conocimientos, sin duda porque el talento les sobraba (en esa parte no me parezco a ellos) y teniendo lo principal no hay nada que esconder.

Un gran placer, Juan. Repito lo dicho: mis puertas siempre están abiertas para las gentes de bien.

Bruno escribió: Francisco, no sabía que eras extremeño, sólamente estuve en tu comunidad de paso hacia Portugal un par de veces, a ver si podemos ir a verte pronto!

Soy extremeño de adopción, no de cuna. La abuela materna de mi mujer era de aquí y comenzamos a venir cuando todavía éramos novios (así se decía entonces). Primero fines de semana, después temporaditas mas largas y en 1981 decidimos abandonar Madrid e instalarnos aquí. Llegamos con un hijo todavía pequeño y ahora tenemos tres.

Me siento muy bien aquí aunque me aburra cuando debo pasar, como ahora, temporadas sin poder moverme por causas ajenas a mi voluntad. Esta ciudad (lo es desde Juan II de Castilla) tiene un tamaño perfecto para hacer la vida, ni demasiado pequeña ni grande. La capital está unida por autovía y son veinte minutos escasos.Lisboa a tres horas, Madrid un poco menos, Salamanca a la misma distancia que Madrid y Sevilla también.

JBG escribió: Pues Trujillo para una quedada fotográfica es una maravilla, no solo por el pueblo que es una preciosidad, sino por el campo que tiene alrededor que es una pasada.

Pues ya sabes, organizadlo y hacemos fotografías por la ciudad y aledaños. Alguna vez me he encontrado por la parte antigua a fotógrafos haciendo arquitectura con sus cámaras de GF. Así conocí a Plyler, por pura casualidad. Venía con un grupo de jóvenes norteamericanos que estaban trabajando con él en un master. Acabamos cenando juntos y forjando una amistad que todavía dura.