Retratos con focal de 50mm

Retrato de Monsieur Jacques Aumond
M2, Summicron 50mm



Jaques Aumond vive cerca de Bayeux, en el Norte de Francia. Solo tenía 14 años cuando las tropas aliadas desembarcaron en Normandía el 6 de Junio de 1944. En sus propias palabras: “Tuve la suerte de tener la suficiente edad como para poder recorder ese día y al mismo tiempo, ser lo suficientemente joven para no darme cuenta del todo de los horrors de la guerra”. Tomé este retrato en el salon de su casa en una preciosa tarde de verano y nunca podrá olvidae todas las experiencias que me contó de la segunda Guerra mundial en Normandía, algunas de ellas realmente sorprendentes.

Gran retrato y se le ve excelente persona. Me ha recordado a mi padre, pues es del mismo año 1930. Y el también sufrió y vio en directo la batalla del ebro. Y pudo ver como se ejecutaban a personas del pueblo cuando entraron los llamados "nacionales".

Gracias por este retrato.

Para mi fue enormemente entrañable. Le dije al marchar que para mi había sido una experiencia extraordinaria el haber podido hablar con él, y que mi padre había nacido en 1929, así que prácticamente tenían la misma edad.

Entre otras cosas me contó que en la ocupación alemana, los soldados y oficiales de la Wehrmacht tenían un buen trato con los franceses, y se saludaban cordialmente todos los días. Había respeto y cada uno se dedicaba a lo suyo. Ni que decir tiene que las SS eran otra cosa y el señor Aumond me confirmó que no eran otra cosa que asesinos sin alma que avergonzaban al propio ejército alemán.

Fue especialmente interesante lo que me dijo de la confusión que generaba entre ellos el hecho de que con el "enemigo" alemán había la relativa cordialidad que ya he señalado, mientras que los que les bombardeaban una noche si y otra también eran los "aliados". De hecho, y esto está perfectamente documentado, los ingleses bombardearon Caen hasta no dejar en pie nada más que la Catedral y el Hospital, el cual se salvó debido a que varias enfermeras colocaron en los jardines del mismo sábanas con una cruz roja pintada con la propia sangre de los heridos. Curioso comportamiento cuando el destacamento alemán en Caen no llegaba a los 200 soldados.

El y su familia durmieron muchas noches de bombardeo en trincheras, técnica que había conocido su padre en la primera guerra mundial. Fue muy chocante una frase que me confió: "La historia la escriben los vencedores".

Y otra cosa más: El pueblo francés se dio cuenta de que Estados Unidos consideró Francia no como un país a liberar, sino un territorio que simplemente era el paso hacia Berlin. Esto es conceptualmente tan importante que explica perfectamente la política militar francesa de después de la guerra, siempre tan independiente.

En fin, no puedo sino recomendar una visita a Normandía. Pone en contexto toda la segunda mitad del siglo XX.

Yo estuve en Normandia y realmente sientes algo en el ambiente, pensar la cantidad de gente que murió por la ambición de unos pocos.

scheerer escribió: Para mi fue enormemente entrañable. Le dije al marchar que para mi había sido una experiencia extraordinaria el haber podido hablar con él, y que mi padre había nacido en 1929, así que prácticamente tenían la misma edad.

Entre otras cosas me contó que en la ocupación alemana, los soldados y oficiales de la Wehrmacht tenían un buen trato con los franceses, y se saludaban cordialmente todos los días. Había respeto y cada uno se dedicaba a lo suyo. Ni que decir tiene que las SS eran otra cosa y el señor Aumond me confirmó que no eran otra cosa que asesinos sin alma que avergonzaban al propio ejército alemán.

Fue especialmente interesante lo que me dijo de la confusión que generaba entre ellos el hecho de que con el "enemigo" alemán había la relativa cordialidad que ya he señalado, mientras que los que les bombardeaban una noche si y otra también eran los "aliados". De hecho, y esto está perfectamente documentado, los ingleses bombardearon Caen hasta no dejar en pie nada más que la Catedral y el Hospital, el cual se salvó debido a que varias enfermeras colocaron en los jardines del mismo sábanas con una cruz roja pintada con la propia sangre de los heridos. Curioso comportamiento cuando el destacamento alemán en Caen no llegaba a los 200 soldados.

El y su familia durmieron muchas noches de bombardeo en trincheras, técnica que había conocido su padre en la primera guerra mundial. Fue muy chocante una frase que me confió: "La historia la escriben los vencedores".

Y otra cosa más: El pueblo francés se dio cuenta de que Estados Unidos consideró Francia no como un país a liberar, sino un territorio que simplemente era el paso hacia Berlin. Esto es conceptualmente tan importante que explica perfectamente la política militar francesa de después de la guerra, siempre tan independiente.

En fin, no puedo sino recomendar una visita a Normandía. Pone en contexto toda la segunda mitad del siglo XX.

Fantástico retrato y maravillosa historia.
Gracias.

jhon escribió: Excelente fotografia. Muy conseguida, y has dabido aprobechar muy bien la luz de la ventana trasera. La fuente principal delantera que era, otra ventana?.

Si, creo recordar que efectivamente, había otra ventana que daba al patio principal de la casa. La luz era preciosa.

leican escribió: Yo estuve en Normandia y realmente sientes algo en el ambiente, pensar la cantidad de gente que murió por la ambición de unos pocos.

Y tanto. Recuerdo la visita el cementerio Norteamericano que está enfrente de la playa de Omaha. Se me saltaron las lágrimas. Tomé esta foto allí. En ella se ve a un antiguo compañero de armas que probablemente habría intervenido en el desembarco. Os puedo decir que ponía la piel de gallina: